Prevención del embarazo precoz
Cuando se habla de educación sexual o del propio acto en sí, es muy común escuchar preguntas del tipo: la higiene íntima con ducha vaginal después del acto, ¿previene el embarazo?; cuando el sexo tiene lugar de pie, ¿hay riesgo de embarazo?; ¿se puede quedar embarazo en la primera relación sexual? Todo este tipo de preguntas “mitológicas” pasan por la mente de nuestros adolescentes y la respuesta para todas ellas es afirmativa pero, ¿lo llegan a saber antes de tener su primera toma de contacto en el terreno sexual? Entonces, ¿es escasa la prevención del embarazo precoz que aplican los adolescentes a sus vidas?
No importa qué tipo de higiene o arreglo personal se realice después del acto sexual porque eso no va a cambiar el curso de lo que sucede naturalmente: el esperma se libera en el canal vaginal durante la eyaculación, o incluso antes, por medio del lubricante líquido producido por el hombre. La ducha posterior al acto sexual, las posturas verticales, la marcha atrás y otro tipo de métodos no garantizan que no se vaya a producir el embarazo y esto debe entrar en la cabeza de nuestros adolescentes, ya sea por medio de información digital o por medio de la boca de los padres. Es necesario garantizar que nuestros hijos están bien informados para que no se cometan errores y no surjan situaciones inesperadas como el embarazo precoz.
Por lo tanto, la única forma de prevenir un embarazo precoz o un embarazo estándar es mediante la utilización de métodos anticonceptivos. Evidentemente, unos métodos son más seguros que otros y los porcentajes de fiabilidad así lo determinan, por lo que es cuestión de elegir adecuadamente.
1.- Espermicida
El espermicida es un producto, una especie de gel, que se puede comprar en las farmacias sin receta médica y se usa para matar o inmovilizar los espermatozoides impidiendo así que llegue, al óvulo. Se aplica en la vagina justo antes del acto sexual, pero no ofrece el mismo grado de protección que los condones, por ejemplo. Idealmente, es ideal para ser utilizado junto con preservativos, aumentando así su eficacia.
2.- Diafragma
El diafragma es otro método ideal para combinar con el espermicida. De hecho, sólo funciona bien de esta forma. Es un objeto con forma cóncava, bordes redondeados y hecho de caucho flexible. Para utilizarlo es necesario aplicar el espermicida y luego insertarlo en el canal vaginal. Actúa como una barrera protectora del útero.
3.- Condón
Es el método más seguro de la anticoncepción dejando hormonas a un lado pero se debe tener en cuenta que no es eficaz al 100% sino al 90%, es decir, hay una mínima probabilidad de que la adolescente se vea afectada por un embarazo precoz.
La gran ventaja de este método es que evita cualquier tipo de enfermedad de transmisión sexual. Además, puede ser utilizado tanto por la pareja (condón masculino) como por la adolescente (condón femenino). Su compra es fácil dado que están disponibles en farmacias, máquinas y supermercados. Eso sí, hay que asegurarse de la fecha de caducidad que llevan impresa y tener mucho cuidado para no romperlos.
4.- Las píldoras anticonceptivas
Las píldoras anticonceptivas más populares ocupan el primer lugar en el ranking de los métodos anticonceptivos utilizados por las chicas. Esto es, en primer lugar porque su fama de método seguro es grande. Segundo porque el acceso a este producto, también es muy fácil.
La mayoría de las farmacias no piden una receta para vender estos anticonceptivos y muchas mujeres usan este medicamento sin consejo médico. Es importante señalar que esta actitud no debe ser cultivada. El uso de cualquier medicamento por su cuenta es arriesgado para la salud. Las píldoras, generalmente, causan efectos secundarios tales como aumento o disminución en el peso, dolores de cabeza, náuseas, mareos, entre otros. Por eso, recomendamos acudir al médico antes de consumir este tipo de medicamento.
No hay duda entonces de que el mejor remedio para no quedar embarazada es evitar, ¿verdad? Pero si algo sale mal es importante saber que existe un método de anticoncepción de emergencia: la píldora del día después. Es un medicamento que se debe utilizar cuando, por accidente, otros métodos fallan. Importante: sólo en casos extremos.
No se puede ser irresponsable e ir en torno a tener relaciones sexuales sin protección y de tomar la píldora cada vez que se practique sexo. La eficiencia en el uso de la «píldora del día después» se relaciona con el tiempo que lleva entre el acto y el consumo de esta: cuanto antes se tome, mayor será su eficacia. Su mal uso puede ser perjudicial para el embarazo, por lo que debe ser dirigido por el médico.
La prevención del embarazo precoz es la única solución posible que puede parar estos aumentos de natalidad tan peligrosos. ¿Están las sociedades concienciadas para llevarla a cabo?